BLAUFRÄNKISCH LEITHABERG
Año: 2020
¡Mineral y fruta!
Los vinos de la región de Burgenland encarnan una alta individualidad y un estilo purista.
Leithaberg DAC representa técnicas de cultivo naturales y un énfasis en las características típicas de la región.
El Blaufränkisch Leithaberg DAC es un intenso rojo rubí con un núcleo oscuro.
Cerezas puras, moras, grafito, regaliz y especias herbales en la nariz.
Fruta de cereza fresca en el paladar, estructura rígida, juguetón y a la vez directo. Un vino con elegantes taninos llevados por la acidez.
Las bayas oscuras y las especias dominan el paladar.
Recomendación: decantar 1 hora antes de beber.

PUNTOS - Wine Companion
PRECIO:






AUSTRIA BIO GARANTIE
Viñedos Ecológicos

Vinestra es la primera empresa en Colombia que importa la marca europea Hillinger, reconocida como una de las mejores marcas de vinos en todo el mundo.
MARIDAJE RECOMENDADO:
El Blaufränkisch Leithaberg es un acompañante ideal para los siguientes platos, maridajes y acompañamientos recomendados:
CARNES ROJAS A LA PARILLA
- Entrecot sellado
- Lomo fino al carbón
- Costillas de res ahumadas
Por qué funciona: El Blaufränkisch tiene taninos firmes que interactúan positivamente con las proteínas de la carne, suavizando su textura. Sus notas de ciruelas, moras y especias resaltan la caramelización y los jugos propios de una buena parrilla. Su acidez equilibrada limpia el paladar entre bocados grasos, haciendo que cada mordisco se sienta fresco y apetitoso.
GOULASH HÚNGARO O ESTOFADOS ESPECIADOS
- Goulash húngaro con pimentón dulce
- Estofado de cordero con hierbas
- Ossobuco a la vienesa
Maridaje ideal porque: Este tipo de cocina tiene salsas espesas, especias cálidas y un toque picante que combina muy bien con la estructura frutal y especiada del vino. El Blaufränkisch tiene una profundidad que soporta bien cocciones largas y sabores intensos. Su perfil mineral y elegante aporta frescura, sin competir con los sabores ricos y terrosos del guiso.
- Venado
- Jabalí
- Magret de pato con reducción de cerezas
- Perdiz en salsa de vino tinto
- Faisán con setas
Por qué funciona: Las carnes de caza tienen sabores más profundos y complejos, por lo que requieren un vino con cuerpo y carácter. Las frutas negras y las notas de pimienta del Blaufränkisch realzan las carnes oscuras, sobre todo si se cocinan con elementos dulces como frutas rojas o glaseados. La acidez natural del vino equilibra muy bien la grasa del pato o de la caza.
- Goulash húngaro
- Wiener schnitzel
- Salchichas ahumadas con chucrut
Por qué funciona: El perfil especiado y mineral del vino armoniza con los sabores contundentes y grasos de la cocina del centro de Europa. Su carácter especiado y elegante contrasta con lo frito y lo salado, como en el schnitzel, y armoniza con lo ácido como el chucrut. En platos más rústicos y grasos como los Spätzle o las salchichas, el vino actúa como un refrescante natural, manteniendo la elegancia en boca.
- Risotto de setas
- Pasta con crema de trufa
- Tostadas con champiñones salteados
- Huevos pochados con setas
Por qué funciona: El Blaufränkisch tiene un perfil terroso y especiado que resuena de forma perfecta con los sabores profundos y umami de los hongos.
Cuando se trata de trufas o ingredientes intensos, el vino no compite, sino que complementa.Aporta una dimensión aromática sofisticada que eleva preparaciones simples con ingredientes de temporada.
QUESOS CURADOS
- Manchego añejo
- Comté
- Gruyère
- Queso de cabra envejecido
Por qué funciona: La estructura del vino resiste la intensidad del queso sin sobrepasarla, creando un equilibrio armonioso. Los quesos duros y maduros tienen una alta concentración de grasas, sal y proteínas, que necesitan de un vino con buena estructura y frescura para limpiar el paladar. El Blaufränkisch también puede acentuar las notas a nuez y mantequilla de estos quesos.
VERDURAS ASADAS
- Berenjenas
- Pimientos
- Cebollas
- Remolachas
Por qué funciona: La dulzura caramelizada de las verduras asadas combina con los taninos suaves y la acidez del vino.
- Pescados delicados
- Platos muy picantes
- Postres dulces
- Comidas ácidas (como ceviches) y salsas muy cremosas
Estos sabores no armonizan con su carácter estructurado, taninos firmes y acidez marcada. Pueden hacer que el vino se sienta amargo, metálico o demasiado intenso en boca.